viernes, septiembre 09, 2005
a las
12:53:00
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Es una pena tener que hablar de algo así en mi segundo post pero la realidad es demasiado cruda como para ser ignorada. Este ha sido el verano (y probablemente la sucesión de meses independientemente de la estación) con más incendios forestales (sobretodo en España y Portugal) y en ciudades (sobretodo París), accidentes de avión, inundaciones (norte de Europa), ciclones (el horrendo Katrina y el que ahora mismo hay por Asia) y atentados (como el de Londres de principio del verano). Es algo curioso, al mismo tiempo que nefasto, el hecho de que tantos errores humanos (intencionados o no) se hayan unido a los elementos adversos para crear toda esta destrucción.
No me gusta refocilarme en el dolor ajeno (aunque alguno de estos hechos me ha tocado bastante cerca) pero creo que es bueno recordar que el mundo se está pudriendo y parece aumentar de velocidad. Y los ciudados de a pie con barba de varios días como yo no sabemos muy bien que hacer para mejorar la situación. Eso es algo que me quema por dentro (metçafora de hermanamiento). No sé qué hacer, solo sé que hay que hacer algo.
Requiem aeternam dona eis, Domineet lux perpetua luceat eis.
No me gusta refocilarme en el dolor ajeno (aunque alguno de estos hechos me ha tocado bastante cerca) pero creo que es bueno recordar que el mundo se está pudriendo y parece aumentar de velocidad. Y los ciudados de a pie con barba de varios días como yo no sabemos muy bien que hacer para mejorar la situación. Eso es algo que me quema por dentro (metçafora de hermanamiento). No sé qué hacer, solo sé que hay que hacer algo.
Requiem aeternam dona eis, Domineet lux perpetua luceat eis.
Publicado por
Carlos L. Hernando